martes, 28 de julio de 2015

PHILADELPHIA

El día 16 de julio, sobre las 8 y cuarto de la mañana partimos de Nueva York para el itinerario que nos llevará por distintas localidades del noreste del país. Hoy pasaremos por Philadelphia, metrópolis de un millón y medio de habitantes y puerto industrial situado a orillas del río Delaware. Denominada así por William Penn en 1682, pretendía ser la ciudad del amor fraternal.
Será un rápido paseo que incluye el almuerzo en el restaurante Chart House, a orillas del río y desde el que se tienen hermosas vistas sobre el río.
El primer objetivo es el Museo de Arte de Philadelphia, al que por falta de tiempo no pudimos acceder y en el que había una exposición sobre arte impresionista.
 El Museo está en una enorme explanada, desde la que se observa la ciudad a lo lejos, con enormes edificios verticales.
     La ciudad de Philadelphia desde la explanada del Museo de Arte
En el Oakins Oval, círculo de tráfico situado frente al Museo de Arte, se puede apreciar un grupo escultórico de enormes dimensiones dedicado a Washington. Diseñado este círculo por Jacques Greber en 1917 conforma el parque Benjamín Franklin y le da una amplitud espacial para el albergue de acontecimientos de masas.
                            Monumento a Washington
La fuente con el monumento a Washington fue diseñada por Rudolf Siemering en 1917 para otro lugar y trasladada a éste en 1928. En 1997, coincidiendo con su centenario se restauró.
El monumento se organiza en torno a un Washington uniformado y a caballo, orientado hacia el Ayuntamiento de Fhiladelphia. El nivel inferior se compone de figuras de nativos americanos y de animales originales de Estados Unidos como el búfalo.
 Después pasamos a la explanada que alberga el Salón de la Independencia; en uno de sus extremos se puede ver una lápida con el texto de la primera enmienda de la Constitución de Estados Unidos
El Congreso no podrá hacer ninguna ley con respecto al establecimiento de la religión, ni prohibiendo la libre práctica de la misma; ni limitando la libertad de expresión, ni de prensa; ni el derecho a la asamblea pacífica de las personas, ni de solicitar al gobierno una compensación de agravios.

 
Tras un rato en el lugar, nos fuimos a almorzar. En el camino pasamos por la casa de Betsy Rose, diseñadora de la bandera de los EEUU.
 El almuerzo en el restaurante Chart House fue apetitoso
 Y desde ese marco se puede apreciar la vida marina del lugar, como el tráfico de barcos de carga.
 

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